COMPRENDER EL LADO OSCURO DEL SEXO

¿Eres Perverso(a)?

Una de las ventajas (o desventajas) que nos ha dejado la tecnología es el Internet, pues te puede poner en contacto con gente que tiene variadas e inusuales ideas acerca del sexo. Tal vez recibas varias invitaciones al día para unirte a un club de adictos al sexo, si decides hacerlo, y para que no te tomen por sorpresa, te damos a continuación algunas definiciones básicas acerca de lo que significan los fetiches, las fobias y las adicciones sexuales.

¿Sientes pasión por tu pareja o por sus cosas?

1. Fetichismo "Los fetiches son lujurias muy especificas", dice Jack Morin, sexólogo de San Francisco. " Son una búsqueda por encontrar satisfacción en alguna posesión personal de una persona en particular, no precisamente de su área genital". Su intensidad varia dependiendo de la carga sexual que pueda tener para una persona, aclara Morin. Tal vez puedas sentir una atracción por alguna parte del cuerpo de tu pareja o por lo sexy que se vea, pero no significa que seas fetichista. Un fetiche es tal hasta que se consigue un orgasmo. El problema radica en que como fetichista se le pueda dar mas importancia a un objeto que a la pareja misma. Esto no constituye un problema grave a menos que comiences a robar los zapatos o la ropa intima de tu pareja.
2. Fobias "Una fobia es un miedo irracional que interfiere en tu vida", dice el doctor McCarthy. "Muchas veces, una de tus fobias puede ser un motivo que interfiera en tu capacidad de tener sexo", McCarthy define una fobia como un aversión, como por ejemplo, a su propio cuerpo. Muchos hombres en casos extremos llegan a tener la sensación de que al tener una relación sexual su pene quedara atrapado por la vagina de su pareja. Y aunque el hombre es menos propenso a padecer esta alteración que la mujer, es necesario ponerse en contacto con un especialista para erradicar esta funciones.
3. Adicción Sexual. Una adicción sexual proviene generalmente de una promiscua actividad sexual que se sale de control. Algunos expertos llaman a esto sexo compulsivo. Los adictos al sexo, como los adictos a las drogas, son dependientes de lo que les satisface y necesitan hacerlo varias veces para sentirse bien, dice el doctor Mark Schwartz. Esta necesidad funciona como ansiedad o miedo y es aplicable a otras adicciones. Este es otro caso en el que se requiere ayuda profesional. Tener relaciones sexuales con frecuencia no significa ser un adicto. El problema deviene cuando tus actividades sexuales se vuelven la columna vertebral de tu vida.